La mascara de cristal.

La máscara de cristal (MirrorMask) dirigida por Dave McKean y protagonizada por Stephanie Leonidas, Jason Barry, Gina McKee, Rob Brydon, Dora Bryan, ...
Una película de toques surrealistas y oníricos, nos cuenta la historia de Helena, una chica que trabaja en el circo de su familia pero que sueña, con abandonarlo y llevar una vida normal. Pero, de repente, aparece sumida en un extraño sueño por tierras de fantasía con extraños personajes. Helena deberá encontrar la Máscara de Cristal, un objeto para poder despertar a la Reina de la Luz (su madre) y volver a casa.
Esta película está cargada de metáforas y escenarios fantásticos donde la realidad y ficción se confunden y se hermanan, ya que la una sin la otra no pueden existir.
¨ Hay que aprender a diferenciar lo real y lo ficticio ¨dice su madre a Helena.
Al comienzo de la Película, un personaje pide cuatro entradas para el circo ¨ dos adultos y dos niños ¨, esto nos desvela el puctum y el principal tema de la película; el tiempo, el paso de un estado a otro, un proceso evolutivo de madurez, la transición de la niñez y al madurez. El director utiliza el diptico con coherencia visual utilizando, dos escenarios diferentes, en un mismo tiempo. El tiempo en el sueño como en la realidad marca los cambios de Helena y se ve en la escena de los relojes como los muñecos cambian su estilismo y la vuelven gótica dando retazos de realidad en nuestra maduración de la pubertad.
La cultura nos traslada a otros lugares, nos sirve de transporte y nos ayuda a conocer a otros y a nosotros mismos. Es la etapa de transición entre el sueño y la realidad donde Helena empieza a soñar y se deja llevar volando encima de un libro.
La máscara en el sueño sirve para dar expresión y carácter , pero en el mundo real es totalmente lo contrario. Nuestra verdadera máscara es de cristal es el espejo de nosotros mismos, llegar a conocernos a aceptar a los demás y a nosotros mismos nos hará honorarnos y estar en paz.